La Civilización Romana
Los romanos practicaban una religión politeísta con diversos dioses que gobernaban diferentes aspectos de la vida. Esta creencia religiosa influía en todas sus decisiones importantes.
En cuanto a su organización política, Roma comenzó como una ciudad-estado monárquica donde el rey era elegido por una asamblea para un cargo vitalicio. Cuando el rey estaba ausente, el Senado designaba a un gobernante provisional para mantener el orden.
La economía romana inició en pequeñas comunidades agrícolas con poco comercio. Existía una rígida división de clases sociales donde la ganadería era practicada por clases altas, mientras la agricultura quedaba para las clases bajas y esclavos.
💡 ¿Sabías que Roma fue la ciudad más grande de Europa durante 500 años? Además, es la única ciudad que alberga dos estados: Italia y el Vaticano.
La estructura social romana estaba claramente jerarquizada. En los primeros tiempos se dividía entre patricios (ciudadanos con plenos derechos), clientes, plebeyos y esclavos. Los patricios eran los más poderosos, poseían grandes tierras y eran los únicos que podían votar y ocupar cargos públicos o religiosos.
El papel de la mujer era considerado inferior según las leyes romanas. Jurídicamente tenía el mismo estatus que los niños y su labor se limitaba al ámbito doméstico. La familia se estructuraba alrededor del hombre, y tras casarse y tener su primer hijo, la mujer adquiría el estatus de "matrona".
La cultura romana recibió una fuerte influencia del arte griego, evidente en su pintura, escultura y arquitectura. Roma concentra actualmente el mayor número de bienes históricos y arquitectónicos del mundo, incluyendo el museo público más antiguo.