El cigarro pateador: la venganza perfecta
Después de un mes, los conflictos con el tío Alfonso se intensifican. Cuando los niños se quejan a su madre, ella los ignora y hasta apoya al tío, diciéndoles que él puede castigarlos "a falta de su padre".
Los hermanos, furiosos por esta injusticia, planean la venganza definitiva: el famoso "cigarro pateador". Su plan consiste en disfrazar un cohete con papel de fumar y colocarlo entre los cigarrillos que el tío usa durante la siesta.
La estrategia es brillante en su simplicidad: cortan un extremo del cohete para que no sea demasiado peligroso, pero lo suficiente para darle un susto memorable al tío presumido. Todo depende de que Alfonso, medio dormido, no note la extraña rigidez del cigarrillo falso.
Dato técnico: El "cigarro pateador" era una travesura común en esa época, cuando los cohetes y fuegos artificiales eran más fáciles de conseguir.