Subgéneros dramáticos
Los subgéneros dramáticos se clasifican en formas mayores y menores. Entre las formas mayores encontramos la tragedia (con final funesto), la comedia (busca hacer reír mostrando situaciones ridículas), el drama (puede tener cualquier tipo de final), la tragicomedia (combina elementos trágicos y cómicos), y el auto sacramental (composición breve con personajes bíblicos o alegóricos).
Las formas menores incluyen el entremés (obra jocosa de un acto), el paso (representación breve con diálogos ágiles), el monólogo (representación de un solo actor), la loa (breve poema dramático de alabanza), y el sainete (obra jocosa popular que servía como intermedio). También existen el milagro y el misterio, que representan intervenciones divinas y pasajes bíblicos respectivamente.
Cada subgénero tiene características propias que determinan su estilo, tono y propósito. La elección del subgénero depende de lo que el autor quiera comunicar y cómo quiera que el público reaccione.
🎭 ¡Atención! Para recordar la diferencia entre tragedia y comedia, piensa en las máscaras del teatro: la que llora (tragedia) y la que ríe (comedia).