Diseño Metodológico: La estructura de tu investigación
El diseño metodológico es simplemente el plan que organiza cómo vas a recolectar y analizar los datos en tu investigación. Este plan te ayuda a mantener un orden lógico y asegura que tu trabajo sea confiable.
Para estructurar un buen diseño, debes definir primero el tipo de investigación según su propósito y nivel de conocimiento. Las investigaciones pueden ser exploratorias, descriptivas, correlacionales o explicativas, dependiendo de lo que quieras lograr.
Existen tres tipos principales de diseños. El diseño cualitativo explora experiencias mediante entrevistas u observaciones profundas. El diseño cuantitativo utiliza datos numéricos para medir fenómenos de forma objetiva. El diseño mixto combina ambos enfoques para obtener una visión más completa del tema.
💡 Consejo clave: Elige el tipo de diseño según tu pregunta de investigación, no al revés. Si quieres entender por qué ocurre algo, lo cualitativo podría ser mejor; si necesitas medir cuánto o cuántos, lo cuantitativo será más útil.
En tu diseño también debes definir claramente la población que estudiarás. Esto incluye delimitar el universo de participantes y describir las zonas donde recolectarás la información, justificando brevemente tu elección.
Finalmente, selecciona las técnicas de recolección de datos apropiadas para tu investigación. Puedes elegir entre observación, entrevistas, encuestas, grupos focales o talleres participativos, según lo que mejor se adapte a tus objetivos.