La vida turbulenta del genio
Vincent van Gogh nació el 30 de marzo de 1853 en los Países Bajos, hijo de un pastor protestante. Su temperamento intenso marcaría todo su camino de vida, llevándolo por experiencias muy diferentes antes de encontrar su verdadera pasión.
Comenzó como predicador y estudiante, buscando su lugar en el mundo. En 1886 se trasladó a París con su hermano, donde su arte comenzó a transformarse completamente.
Para 1888, su estilo cambió hacia tonos claros y brillantes. Su amistad con Paul Gauguin fue intensa pero problemática, deteriorándose a los dos meses entre amenazas y arrepentimientos.
Finalmente terminó en Saint Rémy de Provence, donde crearía algunas de sus obras más famosas mientras luchaba con sus problemas mentales.
Punto importante: Los momentos más difíciles de Van Gogh produjeron sus obras más brillantes.