La Colonización: Más Allá de la Conquista
En solo 30 o 50 años después de Colón, ya existían gobiernos coloniales establecidos que controlaban especialmente las áreas de los grandes imperios americanos como aztecas e incas. Estas colonias incorporaron la producción americana al comercio mundial, exportando minerales preciosos y productos agrícolas a Europa.
Un aspecto controversial fue el trabajo forzado. Aunque los Reyes Católicos prohibieron la esclavitud indígena en 1495, y el Papa Paulo III confirmó que los indígenas tenían derecho a la libertad, se crearon sistemas como la encomienda y el yanaconazgo que, en la práctica, explotaban a los nativos.
Para suplir la mano de obra, se desarrolló el comercio de esclavos africanos, trasladando por la fuerza a millones de personas desde África hasta América. Este sistema esclavista se extendió por siglos en diferentes colonias.
Culturalmente, la conquista impuso las características europeas: lenguas europeas (español, inglés, portugués, francés), la escritura, la economía mercantil, y el cristianismo. Esto eliminó muchas tradiciones precolombinas, aunque algunas persistieron mezcladas con elementos europeos.