La reconciliación dentro de la clase dominante
Con la salida de Gómez, hubo espacio para una mayor conciliación dentro de la clase dominante. El columnista "Calibán" llamó a la unidad, defendiendo a la "clase media, industriales, comerciantes, agricultores... todos los creadores de riqueza" como aquellos "que aseguran pan y trabajo a los obreros".
Los antiguos rivales de Gaitán dentro del Partido Liberal comenzaron a utilizarlo como símbolo. El 20 de abril organizaron una manifestación masiva en el Parque Nacional. Algunos oportunistas, como Carlos Lleras Restrepo, quien se había opuesto a Gaitán en el pasado, ahora lo calificaba como "el gran liberal" y "el gran colombiano".
Lleras Restrepo entendió que las masas urbanas debían ser escuchadas y cooptadas. En su discurso reconoció que el poder debía ser constantemente legitimado: "Atrás queda el gesto vanidoso de quienes creen poder sacar de sus propias cabezas todos los programas políticos... Atrás queda el aristocrático aislamiento de los grupos rectores... No podrá ya hacerse en Colombia una política que merezca tal nombre sino con el pueblo".
Los hombres de negocios de todo el país buscaban protección. Los terratenientes, amenazados por invasiones de tierras y venganzas, propusieron al gobierno crear una Guardia Rural Nacional. Desde Cali, Pereira, Manizales y otras ciudades, grupos de ganaderos, agricultores, industriales, comerciantes, banqueros y cafeteros, tanto liberales como conservadores, ofrecieron su apoyo al presidente.
💡 Un grupo de 227 distinguidos caballeros entregó personalmente al presidente un documento de apoyo incondicional a su mandato, aplaudiendo el estado de sitio, alabando al ejército y rogando "que se proscriba la insana y artificial lucha de clases", terminando con un patriótico "Viva Colombia".