Migraciones Germánicas y Caída de Roma
Las migraciones germánicas ocurrieron entre los siglos IV y V, cuando pueblos considerados "bárbaros" (extranjeros fuera de las fronteras romanas) se desplazaron por Europa. No se les entendía por su diferente nivel cultural y lengua.
Estos pueblos se dividían principalmente en dos grupos: los tártaros (procedentes de las estepas asiáticas, conocidos por ser jinetes y arqueros) y los germanos (con una sociedad patriarcal y un derecho basado en costumbres). Las migraciones fueron causadas por el crecimiento demográfico, la necesidad de tierras para asentarse, la debilidad del Imperio Romano y la presión de los hunos.
Entre los eventos más importantes destacan la Batalla de Adrianópolis (378), el primer saqueo de Roma por los visigodos de Alarico (410), la derrota de Atila en Chalons (451), el segundo saqueo de Roma por los vándalos (455) y la deposición del último emperador romano, Rómulo Augústulo, por Odoacro en el 476.
⭐ ¿Sabías que? El año 476 d.C. se considera tradicionalmente el fin del Imperio Romano de Occidente y el comienzo oficial de la Edad Media.
Como consecuencia de estas migraciones, se produjo una ruralización económica centrada en la tierra y las villas. También ocurrió un proceso de síntesis cultural entre lo romano, lo germánico y el cristianismo. Así surgieron los principales reinos germánicos: ostrogodos en Italia, visigodos en la Península Ibérica, francos en las Galias, anglosajones en las Islas Británicas y vándalos en el Norte de África.