Los Diez Mandamientos en acción
Los Diez Mandamientos no son reglas anticuadas del Antiguo Testamento - son principios eternos que siguen siendo súper relevantes hoy. Jesús mismo los resumió en dos: amar a Dios y amar al prójimo.
Los primeros tres mandamientos se enfocan en tu relación con Dios. No tener otros dioses, no usar su nombre en vano, y santificar el día del Señor. En el mundo actual, esto significa no idolatrar el dinero, la fama o el poder, y darle a Dios el lugar que se merece en tu vida.
Los siguientes siete mandamientos tratan sobre las relaciones humanas. Honrar a los padres, no matar, no cometer adulterio, no robar, no mentir, y no codiciar. Cada uno protege algo valioso: la familia, la vida, la fidelidad, la justicia, la verdad.
La doctrina social de la Iglesia aplica estos principios a problemas modernos como la pobreza, la justicia económica, los derechos humanos y la paz mundial. No se trata solo de moral personal, sino de cómo construir una sociedad más justa.
Aplicación práctica: Cada mandamiento te invita a preguntarte: "¿Cómo puedo vivir esto hoy en mi familia, escuela y comunidad?"