Aplicando la Matriz Inversa para Resolver Sistemas
Una vez que tienes la matriz identidad a la izquierda, ¡lo que queda a la derecha es tu matriz inversa! En nuestro ejemplo obtuvimos una matriz inversa con valores como -1, 1, -1 en la primera fila.
Ahora viene la parte genial: para resolver cualquier sistema de ecuaciones lineales Ax = b, simplemente multiplicas: x = A⁻¹b. Es así de sencillo.
La lógica es perfecta: si Ax = b, entonces multiplicando ambos lados por A⁻¹ obtenemos A⁻¹Ax = A⁻¹b, que se simplifica a Ix = A⁻¹b, y como I es la matriz identidad, queda x = A⁻¹b.
Pro tip: Una vez que domines este método, podrás resolver sistemas de 3x3, 4x4 o más variables sin sudar la gota gorda.