Funciones Impares
Las funciones impares tienen una característica especial: son simétricas con respecto al origen de coordenadas. Matemáticamente, una función es impar si cumple con f(−x)=−f(x) para todos los valores de x en su dominio.
Cuando graficas una función impar, puedes observar que si tomas cualquier punto (x,y) de la curva, su punto simétrico respecto al origen (−x,−y) también pertenece a la gráfica. Esto crea un efecto de rotación de 180° alrededor del origen.
Para identificar fácilmente si una función es impar, reemplaza x por −x en la expresión. Si obtienes el opuesto de la función original (es decir, con signo cambiado), entonces has confirmado que es una función impar.
🔍 Observación importante: Una misma función no puede ser par e impar a la vez, excepto en el caso especial de f(x)=0, que es la única función que cumple ambas condiciones.