Sigmund Freud y los Fundamentos del Psicoanálisis
Freud comenzó con una formación positivista estudiando neurología, pero se dio cuenta de que los trastornos mentales no se podían tratar solo desde la medicina tradicional. Por eso cambió su enfoque hacia la hermenéutica (interpretación) y desarrolló el psicoanálisis.
Su gran descubrimiento fue afirmar la existencia del inconsciente - esa parte de nuestra mente que influye en nuestro comportamiento sin que nos demos cuenta. Sin embargo, tuvo un problema: planteaba sus ideas como verdades absolutas y reducía casi todo lo psicológico a lo sexual.
Influencias clave que moldearon su pensamiento incluyen la teoría de la evolución (conceptos de instinto y supervivencia), las investigaciones de Ernst Brüke sobre la relación cerebro-cuerpo, y los estudios de Theodor Meynert sobre anatomía cerebral y farmacología.
Dato curioso: Freud nació en República Checa pero se mudó a Viena por la xenofobia, donde se conectó con el famoso "Círculo de Viena" de pensadores positivistas.
Conceptos fundamentales que desarrolló incluyen la somatización (cuando problemas psicológicos se manifiestan físicamente), la asociación libre (hablar sin censura), y el concepto de trauma como eventos muy dolorosos o placenteros que cambian nuestra vida. También estudió la histeria, manifestaciones físicas que vienen de problemas psicológicos, especialmente estigmatizada en mujeres.
Sus métodos de análisis del inconsciente incluyen los lapsus (cambiar palabras involuntariamente), actos fallidos (conductas repetitivas pero erróneas), chistes de doble sentido, y la interpretación de sueños. Los sueños tienen un contenido manifiesto (las imágenes que vemos) y un contenido latente (lo que realmente significa el inconsciente).
Freud también trabajó con hipnosis y catarsis (desahogarse), desarrollando conceptos como la transferencia (repetir emociones de una figura importante hacia otra persona) y la estructura de la personalidad: Ello, Yo y Superyó.