La Gran Transformación: De Granjas a Fábricas
¿Te imaginas vivir en un mundo sin ciudades, sin fábricas y donde casi todos fueran agricultores? Así era la vida antes de la Revolución Industrial, cuando las sociedades agrarias dominaban el planeta.
Esta revolución no fue solo cambiar herramientas por máquinas. Significó el fin de las relaciones feudales donde los señores controlaban las tierras y los campesinos. Las personas dejaron de producir solo para el autoconsumo (comer lo que cultivaban) y comenzaron a fabricar productos para vender en mercados cada vez más grandes.
El proceso tuvo dos fases principales. La Primera Revolución Industrial (1760-1840) se basó en el carbón como fuente de energía y la máquina de vapor como tecnología clave. La Segunda Revolución Industrial (1870-1914) incorporó el petróleo y la electricidad, revolucionando aún más la producción.
Los sectores que lideraron este cambio fueron la industria textil (fabricación de telas), la industria metalúrgica (trabajo con metales), la siderurgia (producción de hierro y acero) y la industria química. Además, se desarrolló enormemente el transporte, conectando regiones que antes estaban aisladas.
💡 Dato curioso: Este período provocó un aumento de población y un aumento de producción sin precedentes, pero también creó nuevos problemas sociales que aún enfrentamos hoy.