La Reproducción Sexual en las Plantas
Las flores son las partes más importantes de las plantas porque ahí es donde ocurre toda la magia de la reproducción. Imaginate que la flor es como una fábrica donde se crean los gametos masculinos (llamados polen) y los femeninos (llamados óvulos).
Cuando estos gametos se juntan, forman semillas que llevan dentro el embrión de una nueva planta. Es como si cada semilla fuera un "bebé planta" esperando las condiciones perfectas para crecer.
El androceo es la parte masculina de la flor y está formado por los estambres. Cada estambre tiene dos partes principales: un filamento (que es como un tallito delgado) y una antera (la parte gordita de arriba donde se produce el polen).
La antera se divide en dos secciones llamadas tecas, separadas por una pared. Dentro de cada teca hay estructuras especiales llamadas sacos polínicos (dos por cada teca), que son como pequeñas fábricas donde se forman los granos de polen con las células masculinas o anterozoides.
¡Dato curioso! Una sola flor puede producir miles de granos de polen para asegurar que la reproducción sea exitosa.
La parte femenina se llama pistilo y tiene tres partes: el estigma (donde llega el polen), el estilo (como un tubo conector) y el ovario (donde están los óvulos esperando ser fertilizados).