La Transformación del Imperio
En el 285 d.C. el principado romano se transformó en un imperio absoluto o dominado, donde el emperador se convirtió en "Dominus" (dueño). Cuando murió Teodosio en el 395 d.C., el imperio se dividió definitivamente.
El Imperio Romano de Occidente cayó en el 476 d.C., pero el de Oriente perduró y se transformó en el Imperio Bizantino. Aquí aparece Justiniano 527−565d.C., quien cambió la historia del derecho para siempre.
Domicio Ulpiano, jurista del siglo III d.C., estableció tres principios básicos que aún aplicamos: dar a cada uno lo suyo, vivir honestamente y no hacer daño a otro. Justiniano tomó estos principios y compiló todo el derecho romano en una obra monumental.
Belisario, general de Justiniano, recuperó territorios para Roma Oriental, mientras el emperador organizaba 1000 años de historia jurídica en una compilación que usamos hasta hoy.
¡Increíble pero cierto! Santa Sofía, la famosa basílica de Estambul, fue construida por orden de Justiniano como muestra de su poder.