Articulación Temporo-Mandibular (ATM)
La articulación temporo-mandibular está formada por la conexión entre la fosa mandibular del hueso temporal y la apófisis condilar de la mandíbula. Esta estructura permite movimientos en múltiples direcciones, lo que nos da la capacidad de abrir y cerrar la boca, además de realizar movimientos laterales.
Entre ambas superficies óseas se encuentra el disco articular, que divide la articulación en dos compartimentos: el compartimento superior y el compartimento inferior. Esta división crea dos cavidades sinoviales separadas que facilitan el movimiento suave de la mandíbula durante diversas funciones.
Cerca de la articulación encontramos estructuras importantes como el meato auditivo externo y la apófisis estiloides del hueso temporal. También está presente el tubérculo articular del hueso temporal, que sirve como guía para los movimientos mandibulares.
💡 ¡Dato interesante! La ATM es una de las articulaciones más usadas del cuerpo - ¡la utilizamos hasta 2000 veces al día cuando hablamos, comemos o bostezamos!