Leyes del Movimiento de Isaac Newton
¿Alguna vez te has preguntado por qué un objeto se mueve o se detiene? Todo esto tiene que ver con las fuerzas. Una fuerza es una interacción que puede cambiar la velocidad de un objeto, aunque no siempre causa movimiento.
La Primera Ley de Newton dice algo muy simple pero poderoso: un objeto en reposo permanecerá quieto y un objeto en movimiento seguirá moviéndose en línea recta a velocidad constante, siempre y cuando no actúe ninguna fuerza externa sobre él. Esto se relaciona con la inercia, que es la resistencia de los objetos a cambiar su estado de movimiento.
La Segunda Ley de Newton nos enseña que la aceleración de un objeto depende directamente de la fuerza aplicada e inversamente de su masa. Esto se expresa en la famosa ecuación F = m × a. Por ejemplo, empujar un carrito vacío es más fácil que uno lleno porque tiene menos masa.
💡 ¡Dato interesante! Tu peso es en realidad la fuerza gravitacional que la Tierra ejerce sobre ti, siempre dirigida hacia el centro del planeta.
La Tercera Ley de Newton nos dice que las fuerzas siempre vienen en pares: si tú empujas una pared (acción), la pared te empuja a ti con igual fuerza en dirección opuesta (reacción). Esta ley explica por qué sentimos presión en la mano cuando empujamos algo.