Excreción y Líquido Extracelular

La excreción es el proceso que permite a nuestro cuerpo expulsar sustancias que no necesitamos y que podrían ser tóxicas si se acumularan. Es como la limpieza interna de nuestro organismo.

El líquido extracelular se encuentra fuera de las células y representa aproximadamente el 20% del peso corporal total. Está formado por diferentes componentes: el líquido intersticial, el plasma, el líquido transcelular y la linfa.

El líquido intersticial baña nuestras células y funciona como intermediario entre la sangre y el interior celular. El plasma es la parte líquida de la sangre (sin células) y transporta oxígeno, nutrientes y desechos. Por otro lado, el líquido transcelular ocupa una pequeña porción del espacio extracelular.

💡 ¿Sabías que la linfa tiene tres funciones principales? Devuelve parte del plasma a la sangre, transporta grasas absorbidas en el intestino y produce células de defensa contra infecciones.

Órganos de Excreción

Los órganos excretores varían según el tipo de animal. En vertebrados, el sistema urinario está compuesto principalmente por:

Los riñones son los órganos donde ocurre la filtración de la sangre y la formación de orina. Tienen estructuras especializadas como el glomérulo (donde la sangre entra por la arteriola aferente y sale por la eferente) y el asa de Henle que ayudan en este proceso.

Los uréteres conducen la orina desde los riñones hasta la vejiga, mientras que la uretra la lleva desde la vejiga hacia el exterior. Algunos animales como los anfibios tienen una cloaca, que sirve tanto para la expulsión de desechos como para funciones reproductivas.

En invertebrados encontramos estructuras diferentes: los protonefridios conectan células internas con el exterior, los metanefridios recogen líquido de la cavidad corporal, y los túbulos de Malpighi llevan desechos al intestino.

🔍 Existen medicamentos llamados diuréticos que aumentan la producción de orina. Algunos tipos son los inhibidores de la anhidrasa carbónica, diuréticos de asa, tiazidas y diuréticos ahorradores de potasio.

Anatomía Renal Comparada

Los riñones tienen diferentes formas y ubicaciones según la especie animal, ¡lo cual es fascinante para entender la adaptación!

En bovinos, los riñones son lobulados u ovoides, con el izquierdo más agudo en su parte craneal. Se localizan cerca de las vértebras lumbares 1 a 4. Los equinos tienen riñones con forma de frijol (izquierdo) y de corazón (derecho), ubicados en las últimas costillas.

Los caninos presentan el riñón izquierdo relacionado con el bazo, mientras que el derecho está ligeramente más adelantado. Se encuentran en el espacio retroperitoneal del abdomen anterior. En felinos, ambos riñones suelen ser del mismo tamaño (más pequeños en hembras) y se ubican en el abdomen entre vértebras.

En aves, los riñones son lobulares, con forma independiente al tamaño, sin límite preciso entre corteza y médula. Están ubicados en las fosas ventrales de los huesos sinsacro e ilion, dorsales a los sacos aéreos abdominales.

🐾 ¡Curioso! En ovinos y caprinos, los riñones se parecen a un frijol muy redondeado. El derecho se encuentra ventral respecto a las primeras apófisis transversas lumbares, mientras que el izquierdo se sitúa a la derecha del plano medial.

Estructura Renal y Formación de Orina

La unidad funcional del riñón es la nefrona, que se distribuye entre la corteza y la médula renal. En la corteza encontramos las cápsulas renales, mientras que en la médula se desarrolla el proceso de concentración de orina que finalmente llega a la pelvis renal y sale por el uréter.

Los uréteres son tubos delgados y musculosos que transportan la orina desde cada riñón hasta la vejiga. La vejiga funciona como un almacén temporal de orina antes de ser expulsada del cuerpo.

La orina está compuesta aproximadamente por 95% de agua y 5% de residuos. Entre los residuos nitrogenados encontramos urea, creatinina, amoníaco y ácido úrico. Una orina normal debe ser clara, transparente, sin glucosa ni sangre, con olor ligeramente aromático y ácido, y de color transparente o ambarino.

💧 La orina es como un "informe de laboratorio" natural: sus características pueden indicar si hay problemas de salud en nuestro organismo, por eso los médicos a menudo solicitan análisis de orina.

Factores que Afectan la Orina

Varios factores pueden modificar tanto la calidad como la cantidad de orina que producimos, ¡y esto es completamente normal!

La hidratación es fundamental, pues el centro de sed en el hipotálamo regula la síntesis de ADH (hormona antidiurética), que ayuda a concentrar la orina. Cuando bebemos mucha agua, la orina será más clara y abundante; cuando bebemos poca, será más concentrada y escasa.

La alimentación también influye directamente: ciertos alimentos pueden cambiar el color, olor o composición de la orina. El clima es otro factor importante, ya que en ambientes calurosos perdemos más agua por sudor y producimos menos orina, mientras que en climas fríos ocurre lo contrario.

Las patologías o enfermedades pueden alterar significativamente las características de la orina, tanto en cantidad como en composición. El proceso completo de formación de orina incluye: filtración en los capilares del glomérulo, secreción de sustancias, reabsorción, y finalmente la micción.

🔬 El recorrido de la orina es fascinante: desde la ultrafiltración en el glomérulo, pasa por el túbulo contorneado proximal, el asa de Henle, el túbulo contorneado distal, la papila renal, los cálices renales, la pelvis renal, el uréter, el trígono vesical y finalmente sale al exterior.

Reproducción: Complemento del Estudio

La reproducción es el proceso mediante el cual se crean nuevos organismos a partir de células madres. Aunque no forma parte directa del sistema urinario, ambos sistemas comparten estructuras en muchos animales.

Existen dos tipos principales de reproducción: sexual y asexual. En la reproducción sexual se necesitan dos individuos y ocurre la fecundación entre dos gametos, es más lenta y genera descendencia con características diferentes a los padres. La reproducción asexual requiere solo un individuo, no existe fecundación ni gametos, es rápida y produce descendencia idéntica al progenitor.

El sistema reproductor masculino incluye: testículos, epidídimo, conducto deferente, glándulas accesorias (vesículas seminales y próstata) y pene. Por su parte, el sistema reproductor femenino consta de: vagina, útero, trompas de Falopio y ovarios.

🧬 La conexión entre el sistema urinario y reproductor es evidente en muchos animales, donde la uretra sirve tanto para la eliminación de orina como para el paso de espermatozoides en los machos, mostrando la eficiencia evolutiva de nuestros cuerpos.