Respiración Celular
¿Cómo obtienen energía tus células? A través de la respiración celular, un proceso donde se rompen moléculas grandes como la glucosa (reacciones catabólicas) para liberar la energía contenida en sus enlaces. Esta energía no se libera toda de golpe, sino en pequeñas ráfagas que se almacenan en forma de ATP.
La respiración celular consta de cuatro etapas principales. Todo comienza con la glucólisis, donde la glucosa se transforma en dos moléculas de piruvato, generando ATP y NADH. Luego viene la oxidación del piruvato, que ocurre en la matriz mitocondrial, donde el piruvato se convierte en acetil-CoA, liberando CO₂ y produciendo más NADH.
La tercera etapa es el ciclo del ácido cítrico, donde el acetil-CoA pasa por un ciclo de reacciones químicas que producen ATP, NADH y FADH₂. Finalmente, en la fosforilación oxidativa, el NADH y FADH₂ depositan electrones en la cadena de transporte de electrones, generando la mayor parte del ATP.
💡 ¡Dato interesante! Durante la fosforilación a nivel de sustrato, un grupo fosfato se transfiere directamente de un intermediario a ADP para formar ATP, sin necesidad de la cadena de transporte de electrones.