Clasificación de Articulaciones Sinoviales
Las articulaciones sinoviales se clasifican según el número de caras articulares en simples (dos caras), compuestas (más de dos caras), complejas (con fibrocartílago) y combinadas (funcionalmente unidas pero anatómicamente separadas).
Según la forma de las caras articulares tenemos varios tipos: trocoideas (cilíndricas con eje vertical), gínglimos (tipo polea), elipsoideas (segmentos de elipse), condilares (doble elipse), en silla de montar (doble curvatura) y esféricas.
Por su función o ejes de movimiento se dividen en monoaxiles (un eje, como gínglimos), biaxiles (dos ejes, como elipsoideas) y poliaxiles (tres ejes, como esféricas). Esta clasificación funcional es clave para entender los movimientos posibles.
En las radiografías, las articulaciones se ven como líneas radiotransparentes llamadas interlínea articular debido al cartílago que no absorbe rayos X como el hueso. Esto es fundamental para evaluar el estado articular.
Importancia clínica: Los traumas articulares que alteran la cápsula o posición ósea son frecuentes, por lo que dominar estas características te ayudará en prevención y tratamiento.