Sistema Somático y Respuestas Reflejas
A diferencia del sistema autónomo, el sistema nervioso somático controla las acciones que realizamos voluntariamente, como mover un brazo o hablar.
Este sistema transmite la información captada por los receptores sensoriales (ojos, oídos, piel) hacia el cerebro, que elabora una respuesta consciente. Por ejemplo, si decides tomar un libro de tu mochila, tu cerebro envía instrucciones precisas a los músculos de tu brazo y mano.
Pero, ¿qué pasa cuando tocas algo caliente? ¡Tu mano se retira automáticamente antes de que siquiera pienses en ello! Esto es una respuesta refleja, una reacción rápida y automática que no necesita la participación del cerebro.
Las respuestas reflejas son elaboradas en la médula espinal y siguen un camino llamado arco reflejo:
- Los receptores perciben el estímulo (calor)
- Las neuronas sensoriales llevan el impulso a la médula
- La médula procesa la información y genera una respuesta
- Las neuronas motoras llevan la orden a los músculos
- Los músculos ejecutan la acción (retirar la mano)
Este proceso es mucho más rápido que si la información tuviera que llegar hasta el cerebro, procesarse allí y regresar, lo que nos protege de posibles daños.
¡Dato de supervivencia! Los reflejos son mecanismos de protección que nos permiten reaccionar instantáneamente ante peligros, ¡incluso antes de ser conscientes de ellos!