Estructura del Ambiente
¿Te has preguntado qué hace posible la vida en la Tierra? Todo comienza con los factores abióticos como la atmósfera que nos envuelve y la energía solar. El sol no solo nos da luz y calor, sino que sus rayos (ultravioleta e infrarrojos) influyen en todo el planeta, aunque la capa de ozono nos protege de la radiación dañina.
El agua es otro factor abiótico esencial, presente en océanos, lagos, ríos y mares. Este medio acuático permite el desarrollo de muchísimos seres vivos. También el suelo y su topografía (montañas, colinas y valles) crean diferentes ambientes según su altitud, relieve y pH, que puede ser ácido, neutro o alcalino.
⚡ ¿Sabías que? La atmósfera no solo nos permite respirar, también ejerce gravedad atrayendo los cuerpos hacia el centro de la Tierra y nos protege de radiaciones peligrosas.
Entre los factores bióticos encontramos a los productores (plantas y microorganismos fotosintéticos) que fabrican su propio alimento. Los consumidores se clasifican según de quién se alimentan: herbívoros (comen plantas), carnívoros primarios (comen herbívoros) y carnívoros secundarios (comen a otros carnívoros). Finalmente, los reductores como hongos y bacterias descomponen la materia orgánica.
Esta compleja red de interacciones entre factores abióticos y bióticos es lo que mantiene el equilibrio en nuestro planeta. Cada elemento depende de otros y juntos forman la estructura básica de todos los ecosistemas.