La teoría que revolucionó la ciencia
Cuando Darwin regresó a Inglaterra en 1836, empezó a desarrollar una idea revolucionaria. La inspiración le llegó al leer un libro del economista Thomas Malthus sobre el crecimiento de la población humana. Malthus explicaba que los humanos se reproducen más rápido de lo que pueden conseguir comida.
Darwin aplicó esta idea a los animales y plantas, y ¡eureka! Nació la teoría de la selección natural. Su razonamiento era genial: si nacen más crías de las que pueden sobrevivir, solo las mejor adaptadas logran reproducirse y pasar sus características a la siguiente generación.
En 1859 publicó "El Origen de las Especies", conocido como "el libro que sacudió al mundo". Se agotó el primer día de venta. Darwin explicaba que todas las especies evolucionan gradualmente a través de la selección natural, y que todos los seres vivos descendemos de ancestros comunes.
La reacción fue explosiva. Muchos científicos dudaron porque Darwin no podía explicar exactamente cómo se heredaban las variaciones (la genética aún no existía). Los opositores religiosos se escandalizaron porque la teoría sugería que los humanos habíamos evolucionado naturalmente, no por creación divina.
¡Increíble pero cierto! Darwin trabajó en secreto durante 20 años desarrollando su teoría antes de publicarla. ¡Era consciente de lo controversial que sería!