Tipos de células y sus partes
Las células procariotas son más simples y pequeñas. Tienen una membrana plasmática que las protege y controla lo que entra y sale. Muchas también tienen una pared celular rígida que les da forma y protección extra.
En su interior encontramos el citoplasma donde flotan los ribosomas (que fabrican proteínas) y el material genético en una región llamada nucleoide. A diferencia de las células eucariotas, ¡no tienen núcleo definido! Algunas bacterias tienen plásmidos, que son pequeños círculos de ADN extra.
Las células procariotas pueden tener estructuras externas como el flagelo bacteriano que les ayuda a moverse y pilas (o pili) que les sirven para adherirse a superficies o intercambiar material genético.
💡 ¡Dato curioso! Aunque las células procariotas son más simples, ¡son supervivientes increíbles! Las bacterias pueden vivir en ambientes extremos donde ninguna otra forma de vida puede sobrevivir.
Por otro lado, las células eucariotas (como las de nuestro cuerpo) son más complejas. Tienen un núcleo definido donde guardan su ADN y otras estructuras como vacuolas que almacenan sustancias. Su membrana plasmática es similar a la de las procariotas, pero tienen muchas más partes internas especializadas.