Métodos de Separación y Aplicaciones Clínicas
Las proteínas poseen propiedades físico-químicas que facilitan su estudio y separación. Son moléculas grandes que forman sistemas coloidales en solución, no atraviesan membranas semipermeables y contribuyen a la presión oncótica en el organismo.
El punto isoeléctrico (PI) es el pH al que una proteína tiene carga neta cero. A pH inferior al PI, la proteína actúa como catión, mientras que a pH superior, como anión. Esto es crucial para técnicas como la electroforesis, que separa proteínas según su movilidad en un campo eléctrico.
La electroforesis tiene aplicaciones diagnósticas importantes. Por ejemplo, permite distinguir la hemoglobina normal (HbA) de la asociada a la anemia drepanocítica (HbS), que difieren en un solo aminoácido. También es útil para analizar isoenzimas como la láctico deshidrogenasa (LDH), cuyo patrón de distribución cambia en diferentes patologías.
🩺 Aplicación clínica: Un aumento de la fracción LD1 sobre LD2 (patrón "flip") es característico del infarto de miocardio. Este cambio en el patrón de isoenzimas puede detectarse 12-24 horas después del evento y permanecer alterado durante 7-14 días, lo que lo convierte en un marcador diagnóstico valioso.