Información explícita vs. implícita: Las dos caras del texto
La información explícita es todo lo que el texto presenta directamente, sin necesidad de interpretación adicional. Es como si el autor lo pusiera frente a ti en bandeja de plata. Cuando lees "El gato negro estaba sentado en el alféizar de la ventana", inmediatamente sabes dónde está el gato sin tener que deducir nada.
Por otro lado, la información implícita es aquella que no se expresa directamente, pero se sugiere a través de pistas o indicios. Para descubrirla necesitas leer "entre líneas", analizar detalles sutiles y conectar ideas. Esta información requiere que pongas en práctica tu capacidad de inferencia y deducción.
Para identificar la información implícita puedes usar varias estrategias: prestar atención al contexto, analizar el tono del autor, identificar relaciones entre ideas, considerar el propósito del texto y utilizar tu conocimiento previo. Cada una de estas técnicas te ayudará a descifrar lo que no está dicho explícitamente.
💡 Truco para el ICFES: En el examen, las preguntas sobre información explícita suelen empezar con "Según el texto...", mientras que las de información implícita usan frases como "Se puede inferir que..." o "El texto sugiere que...".