Protagonistas de la guerra cristera
Plutarco Elías Calles fue el presidente de México que inició el conflicto al promulgar la Ley Calles en 1926. Conocido como el "jefe máximo de la Revolución", continuó ejerciendo una fuerte influencia política incluso después de su presidencia, durante el período llamado Maximato.
Emilio Portes Gil asumió como presidente interino tras el asesinato de Álvaro Obregón en 1928. Desde el comienzo de su mandato, mostró disposición para negociar con la Iglesia, lo que facilitó el fin del conflicto armado en 1929.
Entre los líderes cristeros destacó Enrique Gorostieta Velarde, un militar experimentado que dirigió las tropas rebeldes. Aunque no era particularmente religioso, se unió a la causa por sus desacuerdos con Obregón y Calles. Murió misteriosamente justo cuando se negociaba la paz.
Por parte de la Iglesia, José Mora y del Río, arzobispo de la Ciudad de México, hizo declaraciones contra la Constitución que provocaron la respuesta del presidente Calles. Mientras tanto, Leopoldo Ruiz y Flores, como delegado apostólico, jugó un papel clave en las negociaciones de paz junto con el obispo Pascual Díaz Barreto.
💡 Conexión histórica: Aunque los líderes religiosos buscaron la paz, muchos combatientes cristeros de base no confiaban en el gobierno y se resistieron a entregar sus armas, lo que explica por qué el conflicto no terminó completamente en 1929.