Imperio Maya: Los Genios de la Ciencia
Los mayas vivían en el sureste de México, Guatemala, Belice, Honduras y El Salvador. A diferencia de los incas, no tenían un solo emperador, sino que cada ciudad-estado como Tikal, Palenque y Chichen Itzá tenía su propio rey llamado "ajaw".
Su economía se basaba en cultivar maíz, frijoles y calabazas. Pero lo que los hacía únicos era su increíble conocimiento científico: eran expertos en astronomía y matemáticas, crearon un sistema de escritura jeroglífica súper complejo y desarrollaron el famoso calendario maya que era más preciso que el que usamos hoy.
Sus ciudades eran obras de arte: construyeron pirámides, templos y palacios impresionantes. Todo estaba perfectamente alineado con las estrellas y los planetas.
Imperio Azteca: Los Guerreros del Lago
El Imperio Azteca estaba en el centro de México, con su capital Tenochtitlan justo donde hoy está la Ciudad de México. Se extendía desde el Golfo de México hasta el Pacífico.
El emperador Tlatoani gobernaba junto con nobles y sacerdotes. Su economía era súper inteligente: usaban chinampas (islas artificiales) para cultivar en el lago y tenían un comercio extenso de cacao, algodón y jade.
Su religión era muy intensa, con dioses como Huitzilopochtli (dios de la guerra). Tenochtitlan era una ciudad enorme y organizada, con canales y calzadas que la conectaban.
¡Dato impactante! Tenochtitlan tenía más de 200,000 habitantes, ¡más que París en esa época!