Los movimientos artísticos de vanguardia del siglo XX transformaron radicalmente el panorama cultural.
El Creacionismo, fundado por Vicente Huidobro, fue un movimiento poético que buscaba crear realidades completamente nuevas a través del lenguaje. Las características del Creacionismo incluyen el rechazo a la simple descripción de la naturaleza, privilegiando instead la creación de imágenes y metáforas totalmente originales. Entre las principales obras del Creacionismo destacan "Altazor" y "Horizon Carré", que ejemplifican la búsqueda de una poesía pura y autónoma.
El Ultraísmo surgió como una reacción contra el modernismo, caracterizándose por la eliminación de elementos decorativos y la búsqueda de la metáfora como elemento central. Los autores del Ultraísmo como Jorge Luis Borges y Guillermo de Torre produjeron obras ultraístas que se distinguen por su experimentación tipográfica y visual. Las características del Ultraísmo literario incluyen la supresión de nexos lógicos, la eliminación de adjetivos decorativos y la preferencia por temas modernos como la ciudad y la máquina.
El Expresionismo representa uno de los movimientos más influyentes de principios del siglo XX. Las características del Expresionismo incluyen la distorsión de la realidad para expresar emociones intensas, el uso de colores fuertes y contrastantes, y la representación subjetiva de la realidad. Los autores del Expresionismo como Franz Marc y Ernst Ludwig Kirchner crearon obras expresionistas que reflejan la angustia y el desasosiego de su época. En la literatura, el Expresionismo literario se manifestó a través de obras que exploraban temas como la alienación, el conflicto generacional y la crisis espiritual. Entre las 10 características del Expresionismo más destacadas se encuentran la deformación de la realidad, el uso de colores intensos, la expresión de emociones extremas, la temática social y política, y la búsqueda de la expresión subjetiva del artista.