Los peligros de la manipulación política
Pero ojo, que la socialización política también tiene su lado oscuro. En lugar de formar ciudadanos críticos, puede promover el conformismo y hacer que aceptes narrativas sin cuestionarlas. Esto pasa especialmente cuando políticos o medios manipulan la información para mantener su poder.
Las redes sociales, que parecían democratizar la información, se han convertido en campos de batalla llenos de desinformación y teorías conspirativas. Los algoritmos priorizan contenido que genera polarización y emociones fuertes, no necesariamente la reflexión crítica que necesitás para tomar buenas decisiones.
En Colombia, esto se vio claramente durante los debates del Acuerdo de Paz con las FARC en 2016. Las noticias falsas y la información tergiversada influyeron en muchos ciudadanos, contribuyendo a un resultado polarizado. Este caso demuestra cómo la socialización política puede ser usada para dividir en lugar de unir.
El problema se agrava en comunidades donde hay poca educación cívica sólida y acceso limitado a información confiable. En estos contextos, el clientelismo político sigue siendo común, reforzando relaciones de dependencia en lugar de empoderar a los ciudadanos.
¡Alerta! En comunidades rurales o marginadas, la falta de educación cívica puede hacer que la socialización política refuerce la pasividad y el conformismo.