La Violencia y las Bandas Criminales en Medellín: Historia de los Sicarios
Durante la época de Violencia en Colombia en los años 80 y 90, las bandas criminales y el sicariato se convirtieron en una realidad cotidiana en Medellín. Este período, documentado extensamente por Alonso Salazar Medellín en sus investigaciones, revela la compleja estructura social y criminal que se desarrolló en la ciudad, particularmente en la cárcel de Bellavista, uno de los centros penitenciarios más notorios de la época.
Los sicarios, conocidos localmente como "cicceros", formaban parte de una elaborada red criminal que operaba tanto dentro como fuera de las prisiones. Estos jóvenes asesinos a sueldo se caracterizaban por su precisión letal y su peculiar mezcla de violencia y religiosidad. Un ejemplo emblemático es la historia del Pato, un reconocido sicario que fue reclutado por su extraordinaria puntería, quien nunca fallaba un disparo.
Destacado: La religiosidad popular jugaba un papel fundamental en la vida de estos jóvenes sicarios, quienes mezclaban la violencia con rituales religiosos católicos.
La Cultura de los años 80 en Colombia se vio profundamente marcada por estas dinámicas sociales. Los sicarios desarrollaron sus propios códigos culturales y rituales, como se evidencia en sus prácticas religiosas. Mantenían altares con imágenes de la Virgen María, ante la cual rezaban pidiendo protección durante sus actividades criminales, reflejando una contradictoria mezcla de fe y violencia.